El homicidio se considera una conducta, y podemos clasificarla como conducta de batalla cuando el sujeto activo efectúa los movimientos corpóreos necesarios para producir el resultado de la muerte del sujeto pasivo, y conducta de omisión u omisión impropia, en la que el sujeto activo deja de hacer lo que https://optimusbookmarks.com/story18444233/5-t%C3%A9cnicas-sencillas-para-la-reato-di-truffa-ai-danni-dello-stato